Mario Miranda

Blog de filosofía, antropología, gastronomía, diseño y demás interesantes espacios de creación humana.


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El anti-poema a la comida.

Me gusta mucho la comida. Me enorgullece saber cocinar y disfrutar cocinar para mis amigos, familiares o pareja, (aunque ella se queje de que no cocino tan seguido)es una actividad que requiere tiempo, esfuerzo, dinero, técnica y gusto por la buena cocina. Comer solo no es tan recomendable aunque sea una práctica cada vez más común con los ritmos que la vida laboral nos pone pero, aún personas con vida holgada, o sin necesidad de trabajar para vivir, suelen ser comensales solitarios. En los puestos de la calle, los taquitos, hamburguesas, hot dogs, etc. vemos personas solas comiendo de lo más tranquilos y con la única necesidad imperiosa de saciar el hambre, ( los pobres le llaman hambre, los ricos le llaman buen apetito. Ritual ancestral que por millones de años el hombre de todas las épocas y de todas las razas, culturas y costumbres han practicado con y sin conciencia. Comer es un acto íntimo de sociedad, (sea en todos los grados: pobres a ricos, de abajo a arriba y viceversa)requiere aceptar ver al otro o a los otros comer frente a ti, significa desvelar ante los demás, los gestos de la boca, las manos y el rostro en general al introducirnos los sagrados alimentos, sean de la mañana, tarde o noche. Comer es demasiadas cosas: negocio (restaurantes), encuentro (pretexto para el romance), arte y ciencia (gastronomía), pintura, diseño, danza, poesía y remanso. Comer acerca a las personas y las puede alejar definitivamente (veneno). Comer es ofrecer al otro un acto personal, y muy íntimo, (aunque ahora no se observe así y pase a ser la cosa más banal del mundo, como si fuera ver pasar un auto que nadie sabe quién conduce ni a donde va, pero se le ve pasar)Comer requiere saber comer y no sólo comer como animal que satisface una necesidad fisiológica sin saber el porqué o las causas últimas del acto propio de comer. Sazonar especias en la sartén con aceites de oliva e ingredientes varios. Cocinar es un arte noble y libre porque toma como pretexto la urgencia de satisfacer una necesidad animal y la vuelve un acto que con ayuda de la inteligencia y la voluntad, es una de las mejores creaciones del hombre. Ver comer a los demás es un filtro que revela muchos aspectos de la personalidad, es increíble la cantidad de cosas que se pueden aprender con sólo ver comer a los demás. Una maravilla poco explorada. Por desgracia, la comida puede ser un instrumento para llamar la atención y con ello, ganarse unos cuantos dólares y fama impredecible sin tiempo determinado. Pongo un video de gente joven en Corea que se ha vuelto famosa por subir videos en internet, sea mayormente en vivo, streaming live, donde sólo están comiendo platillos típicos de Corea. Atención, no sólo se trata de comer frente a la cámara de video, no, se trata de comer cantidades exageradas de comida. Esto se ha vuelto un éxito (por lo menos en Corea) y son ya muchos hombres y mujeres jóvenes que se han vuelto famosos casi instantáneamente. Algunos han abandonado la creativa actividad debido a problemas de salud, sin embargo, quedan algunos pocos que continúan en la escena gastro-cirquera del fenómeno llamado Muk-bang. Un ejemplo más que nos pone a pensar en el ocio de la juventud actual y la emancipación de las buenas costumbres o en pocas palabras, del buen comer. A ver qué les parece.